1.
Jamás se había sometido a nadie, y
menos a una mujer
La sangre latina que ardía en las
venas del campeón de polo Nero Caracas lo impulsaba a conseguir todo aquello
que quería.
Bella Wheeler había seguido los pasos
de su padre como adiestradora de caballos. Pero el vergonzoso legado de su
progenitor la obligaba a adoptar una postura estrictamente profesional y no
intimar con nadie. Sin embargo, había dos cosas que Nero anhelaba de aquella
mujer hermosa y altanera... el mejor caballo del mundo y el cuerpo puro e
inmaculado que se ocultaba bajo la coraza de hielo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario