Noche tras noche, los
pecaminosos juegos de Griffin Cain convirtieron a la seria y conservadora
Sydney Edwards en una mujer voluptuosa, pero todo eso terminó cuando Griffin
pasó a ser su jefe.
Ella siguió
ayudándolo en la sala de juntas... aunque Griffin en realidad la quería en su
cama.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario